Aproximación y regreso
Cuando la excursión comenzaba y finalizaba en Jérez del Marquesado, era habitual trasladarse hasta la zona en varios de los coches particulares de los socios, lo que permitía una mayor libertad de acción para el regreso o, por ejemplo, para trasladarse a algún lugar concreto para comer una vez finalizada la marcha.
Pero también era habitual trasladarse hasta allí alquilando una furgoneta o incluso en uno o varios taxis. Desde luego, esta segunda alternativa era obligada cuando la marcha finalizaba en Güéjar Sierra, aunque también cabía la posibilidad de dormir en Jérez trasladándose hasta allí el día 
anterior en el autobús de línea (ver crónica de Miguel).
Itinerario
Peña de San Vicente – Mirador Bajo – Cerro del Mirador Alto – El Panderón – Picón de Jeres (3.090 metros) y regreso por el mismo itinerario cuando hasta el punto de inicio el traslado era en coches particulares.
Cuando el traslado hasta el punto inicial era en furgoneta de alquiler o en taxis, el itinerario de regreso se hacía por los Lavaderos de la Reina – Loma de Peña Partida – Papeles – Loma de Maitena – Cuesta de la Viña, para salir a la estación del tranvía de Maitena y de allí a Güéjar Sierra. O bien, por la Dehesa del Camarate y la Peña de los Soldados, para enlazar con el camino de Jérez a Güéjar (ver crónicas de los diarios Ideal y El Día).
Tiempo
10-11 horas, hasta Güéjar Sierra
Comentarios
Crónica del diario Ideal, sin fecha:
“..... La segunda marcha, hecha al Picón de Jeres, se inició en la Casa Forestal de las Peñas de San Vicente, continuando por el Mirador Alto y llegada al Pico de Jeres, que tiene una altitud de 3.086 metros. El descenso lo hicieron por Tajos Negros, Mirador de la Reina, hasta la Loma de Maitena, por Loma Papeles, Cortijo de las Viñas para concluir la prueba en Maitena”.
Crónica del diario El Día de Granada, sin fecha:
“Marcha de alta montaña de los ‘Amigos del Purche’.
Continuando el calendario de alta montaña, el grupo ‘Amigos del Purche’ se desplazó el sábado hasta Jeres del Marquesado para iniciar la marcha a las 6 de la mañana del domingo. Por el camino forestal del Posterillo se inició la subida entre grandes bosques de pinos, sitio donde abundan los jabalíes pues eran muy numerosas las huellas de dichos animales. Continuaron subiendo en dirección a los Peñones de Vicente y ya empezaban a verse los grandes ventisqueros en la vertiente nordeste del Picón. Breve descanso para alimentarse y beber agua en uno de los innumerables manantiales que ya abundarían en todo el recorrido. Subieron por el Mirador Alto y por toda la Cuerda se inició el duro ascenso hasta el Picón de Jeres (3.086 metros de altura). Desde la cumbre, la Naturaleza obsequió a estos montañeros con la vista del circo de los “Tajos Negros” y al fondo los “Lavaderos de la Reina”, maravilloso panorama de ventisqueros nevados e infinidad de lagunillas y chorreras de agua.
Bajaron por la ladera Norte, pasando por las “Rocas del Soldado” y, bordeando los cerros del Camarate, enlazaron la “Loma de Güéjar”. En todo el trayecto encontraron numerosas manadas de caballos y toros que, unido a las preciosas chorreras de agua y teniendo como fondo la vista panorámica del Mulhacén, Alcazaba y Veleta, hicieron grata la marcha.
El grupo lo formaron: Miguel Martínez, Antonio Sánchez, Enrique M. Casinello, Manuel Pancorbo, Antonio Palacios y Juan de Dios Valladares”.
Sobre esta misma excursión, cuya crónica publicó el periódico El Día, hay otra de Miguel que dice:
“Marcha a Jerez del Marquesado-Picón de Jerez-Güéjar Sierra.
Salida el sábado a las 6 de la tarde en el coche de línea de Jerez para llegar a éste a las 9 de la noche, durmiendo y cenando en este pueblo, para salir el domingo a las 7 de la mañana camino del Picón de Jerez.
Llegada a las 6½ de la tarde a Güéjar Sierra.
Componentes de la marcha: (los mismos que da el periódico).
Anécdota: En la subida al Picón nuestro amigo Enrique se entretuvo en espantar una manada de toros, que nos dio una buena corrida que a algunos se nos descompuso el vientre; también durante la parada del mediodía para comer estuvimos comiendo a cien metros de un toro bravo y negro. El regreso de esta marcha fue por la Loma de Güéjar”.
(Fue en una de las excursiones al Picón de Jeres cuando subí por primera vez con la peña a un tres mil, después de mi ingreso en ella, pero me quedé sin bautizo de nieve, a pesar de coincidir también con el día de mi cumpleaños (fue un 7 de julio), quizás porque como era pleno verano la nieve brillaba por su ausencia o porque a la cumbre del Picón solamente subimos Miguel y yo y el día no estaba como para hacer el ganso allí arriba los dos solos pues hizo un día horrible de viento que a nosotros nos lanzó varias veces al suelo tanto durante la subida como a la bajada y aconsejó al resto de compañeros (Juan Valladares, Pedro Soria, Pepe y Miguel Serrano y Pepe Romero) quedarse en la Dehesa del Camarate.La comida en el pueblo de Jérez hizo que olvidáramos los sinsabores de un día en extremo riguroso, meteorológicamente hablando).